domingo, 2 de agosto de 2015

Manifiesto



Inocular el veneno del amor
y abrir el faro de los secretos
hoy es todo uno
porque no obtuve noticia de ti.

Diseccionar un poema es romperlo,
abatirlo, lastimarlo, matarlo por siempre.
Como según se estudie la literatura, es dejarla morir.

Muerta la emoción,
fuera el sentimiento,
lejos del alma.
Mas hay pasión con análisis de lo que fui,
de lo que hemos sido
de lo que somos y lo que seremos.

Por eso no me rindo hoy
a esperarte, pasión.