jueves, 17 de mayo de 2012




¿puede echar raíces una estrella en un jardín?
¿pueden las hojas de sus plantas correr al hado del destino?
¿pueden los hombres seguir las huellas de su buen tino?
¿puede el aire ser amado por el sol
y las rosas recogerse sin espinas?




después como el mar
las expulsa
para dejarlas olvidar



bajo el sol se recogen las rosas
y su vasta estructura
llega a las playas rotas de muestras manos
para avisarnos de que más allá de la apariencia
el peligro nos ronda




entraron sin permiso


para crear las fronteras
secuestraron la sal del mar



puede un alma ser tan bello como se quiera
ponerse el hábito de los cometas
tomar caminos a través como atletas griegos
y no tener ni un ápice de humanidad
entre los dedos


puede alguien, así, en medio del desierto gritar y ser oído