viernes, 11 de noviembre de 2011


Lo mismo
es que emprender un viaje y olvidar el camino de regreso
                                        el poema que escribes.


Diego Jesús Jiménez




Sueño recurrente

El día es largo mas no provechoso.
Hay algo más allá que no consigo ver.
Me quedan cosas por hacer.
Lugares que visitar, rincones que descubrir.

Quiero regresar mas el barco debe salir a su hora.
He llegado tan lejos
y debo regresar.
Apenas he visto la silueta de sus edificios entre la bruma
y el barco zarpa.

Con la cadencia de un transatlántico
me alejo entre brumas de la gran ciudad.
No queda más remedio.
Después de apenas un día de estancia
las puertas se cierran como en un gran fundido a negro.
Y no he de volver jamás.

Como la poesía ha de ser un enigma para los poetas,
la ciudad es un enigma para mí.

domingo, 12 de junio de 2011

Vacía y desnuda de ti







Vacía y desnuda de ti,
vagabundeando migajas de cariño por los rincones,
como si fuera lo mismo,
hallo caricias de consuelo.

Es como encallar en la nada,
como saberse perdida,
sin el muelle de tus brazos.

Y así pasan los días,
tomando distancia
de camino a ninguna parte,
haciéndome más y más pequeña
si cabe.

***

Dice la gente que dice una niña
que se puede llegar a la luna con los dedos
pero yo la perdí.
Quizá haya una estrella que avisto a veces
pero hoy está nublado y ni eso.
Así que me conformaré con imaginarla
y pensar que es la misma que ves tú.
Estés donde estés, compañerito.

Y dicen que mirar por la ventana es síntoma de mal de amores
pero a mí me da igual
y, de hecho, recojo flores,
por si quedaba alguna duda.

Y recogiendo flores,
y mirando por mi ventana,
se pasan las semanas
sin saber nada.

sábado, 7 de mayo de 2011

El mar de tus brazos




Me perdí en el mar de tus brazos
para no volver.

Y siguiendo la misma senda
creí verme lejos de todo lo que me ata,
de todo lo que me duele.

Y como si nada hubiera pasado
llegué a tu orilla para no volver,
como si el tiempo se detuviera
en ese instante último entre tú y yo
me llene de espuma y llanura
para no volver.

Y en este rumbo incierto
con destino en vos
me sabe mal decir que no entiendo
por qué las dudas me asaltan
será que la misma inmensidad es un brete
en el que no quiero perderme.
Será que este amor es real
y a pesar de todo en sus aguas navego
más bien sostenerme intento
más para ello sólo dispongo
de cada uno de tus brazos.

Uno en el pecho, otro en la cintura
como remos de este sin fin de palabras
que me hacen reír y cantar.
Como náufrago marinero
de la farola de tus labios.

martes, 11 de enero de 2011

Mi querido Paso Yobai




"Dejaré un pedazo de mi alma en esta tierra [...]

La fertilidad de esta hermosa tierra roja es su tesoro".






Casi me siento culpable

porque la nostalgia se va agotando,

después de largos días repletos de recuerdo

salgo de nuevo al mundo

y puedo decir: Se terminó.



Sin embargo, algo permanece.


Un bruma...


Cómo seguiros

pequeños cerros entre bruma,


cómo alcanzarte

si mis extremidades no tienen fuerza.

Dame tus anhelos

para hacerlos realidad con mis manos llenas de ti.

Eres humilde y lejana como tu bruma

que veo tras un cristal de kilómetros de espesura.

Tienes una lumbre tierna que se balancea entre mis sienes como sólo tú sabes.

Sabes que no hay tanto ni tan poco

que a distancia sabe más verdadero

tu fruto de la tierra.